Muchos no aguantaron la presión y pusieron fin a una relación.
Y así muchos, se encuentran recogiendo las piezas preciosas de su corazón, distribuidas y esparcidas, como esos recuerdos tiernos y dolorosos que se mezclan entre sí.
Buscando reconstruirse. Como tratando de armar un complejo rompecabezas que al momento no hace ningún sentido.
Qué sentido puede tener, si la vida planeada y soñada era otra ? Se siente un temible vacío que asecha. Y hay que llenarlo, pero con qué ? Si nada sabe igual..
Uno de los secretos de la naturaleza es que el vacío contiene el máximo potencial.
Cuando no hay nada, hay espacio para todo.
Cuando todo se desmorona, la tierra es virgen y fértil de nuevo.
Todo puede ser construido allí.
Pero en ese vacío hecho de nostalgia y soledad quizás no veas salida, porque sin tu corazón entero, hasta respirar se hace difícil.
Puedo decirte que mi corazón ha estallado en pedazos. Que he estado en ese vacío aterrador. Junté las piezas una a una y volvió a creer y arder. Porque nada ni nadie debería quitarnos el amor a la vida. La fe. Y sobretodo la posibilidad de ser felices.
La sonrisa está diseñada para amanecer en tu boca y luego brillar como el sol del mediodía. Así como cae la noche del alma, la luz de la alegría siempre vuelve.
El corazón fue formulado para reconstruirse, una y otra vez.
Las heridas sanan.
Y el amor es una constante que siempre, recuerda siempre, vuelve.
Vía FB Lunalogía
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