Limpiador de energías negativas con Sal y Vinagre

Antes de hacerlo lee la explicación

Solo necesitas vinagre blanco, sal de cocina, un vaso de vidrio nuevo, un plato pequeño que sea nuevo y no de plástico.
- El vaso de vidrio nuevo  llénalo de sal exactamente hasta la mitad.
- Luego agrega al vaso vinagre de vino blanco y llenalo lo más que puedas.

Pon el vaso sobre el plato detrás de la puerta de la casa o de cada habitación o ambiente que consideres necesario y uno debajo de tu cama, indispensable!

No toques para nada lo que está dentro del vaso porque ahí está el problema, al noveno dia, con mucho cuidado agarra el vaso sin que caiga el preparado y de frente lo pones en en lavadero, abres el grifo y lo dejas abierto hasta que el vaso quede limpio. Ahi recién lo puedes tomar con las manos, recomiendan poner el vaso ya limpio con el plato en una bolsa de plástico negra y ese mismo momento llevarlo lejos y botarlos. La vez posterior que lo hagas necesitarás un vaso nuevo, pero ya no será necesario botarlo. Puedes hacerlo cuando sientas que lo necesitas.

Si la sal ha “subido” significa que está limpiando. Bajas (envidias, celos, discusiones, etc.). Si la sal del fondo se ha puesto de colores, anuncia negatividad en el sitio. Si la sal no se ha salido y está normal, significa que no hay negatividad en ese ambiente.

Si la sal forma “escamas” que salen del vaso, dirigiéndose hacia arriba, significa que la negatividad está provocada por enfados, visitas pesadas o malestar emocional. No es peligrosa, pues es una energía que se genera cada día. Puede estar motivada por la simple convivencia y el roce del día a día. Si la sal forma “agujas” que salen de la boca del vaso y cristaliza, significa que la negatividad está provocada por envidias, pensamientos no pronunciados, malestar mental y agresividad. Se nota un ambiente de lucha entre voluntades. En este caso se aconseja que la persona se selle y se armonice el ambiente. Tal vez las personas que ahí están se encuentren mal y su malestar genere una envidia disimulada.

* Después de hacerlo en una segunda ocasión, es recomendable usar el vaso y plato exclusivamente para este ritual.






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